Sobre los Oprimidos y los Opresores I

jueves, 6 de octubre de 2005

Partamos de que todo es un juego. Cada lugar, cada mundo tiene sus propias reglas, tan válidas como reguladoras dentro de ese mundo. Eso es ser relativista o relativista a caso es tratar de mover las reglas correspondientes de un mundo a otro. Sí, el fútbol lo tenemos hasta los huesos, nos guste o no. La sub-17 me puso a pensar, junto con lo que yo, otros colegas, compañeros, amigos y todos los demás hacemos. Todo es un juego, con los deportes es más fácil verlo, no son tan pretenciosos, es obvio. Hay un campo, hay unas reglas y hay un tiempo determinado. Entrenan,que es como su investigación y van a congresos que son los partidos. Fuera de eso la vida sigue, hay que comprar ropa, hay que comer, hay que tomar decisiones. En cambio, el área en la que me desarrollé, lo confunde todo. Tiene un campo, tiene reglas e incluso tiente uno tiempo determinado. También hay entrenamientos y premios y despeciones, pero salgo de ahí y la psicología te regala la falsa esperanza de comprender mejor al mundo, pensamos que tenemos las herramientas suficientes para entendernos y resolver nuestros problemas. Para sorpresa de todos no es así. No nos enseñan a salvar matrimonios, no nos enseñan a cambiar las cosas. Nos enseñan a usar un método, pisar el campo y jugar durante un rato. Lo malo es que el balón y el campo son engañosos. Sin ellos la vida sigue y la reflexión sobre nosotros mismos carece de carácteres psicológicos. Nos refugiamos mejor en el arte y en reflexiones completamente cotidianas. A lo sumísimo podemos entender un poco de neurosis, un poco de condicionamientos y secreciones placenteras. Sabemos de químicos cerebrales y procesos cognitivos, un poco de motricidad y tal vez hasta de economía mundial. La mayoría de mis conocidos psicólogos gusta del arte y otras expresiones. Algo que tiene mucho sentido, pues es obvio que la psicología no alcanza. Tan no alcanza que terminamos trabajando en algo que si se parece pero que no es psicológico por si mismo. Sentimientos, tumores, partidos de fútbol, los presidentes, los celos profesionales, las relaciones autodestructivas, las malas compañías, los chistes, los ojos amoroso, las listas vacuas que buscan con ejemplos demostrar algo. ¿Qué es todo eso? Lo humano, desde los millones de años luz de espacio vácio hasta una partícula de color en un cuadro fam(el clásico ejemplo que va de lo muy muy grandote a lo muy muy chiquito, y lo muy muy importante es todo lo de en medio).

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